14 de diciembre de 2015

El cambio climático causará más incendios en EEUU y Europa

En el Periodo Cálido Medieval aumentó la frecuencia de incendios naturales en los bosques de las Montañas Rocosas a pesar de que la temperatura se incrementó en solo 0,5 grados centígrados.
 
Científicos de las universidades de Wyoming (Estados Unidos) y Granada (España) predicen que el aumento de la temperatura en las últimas décadas debido al cambio climático provocará más y más fuertes incendios naturales en los bosques de las Montañas Rocosas (Colorado, Estados Unidos), y también en otras áreas de aquel país y de Europa.
 
En un artículo de la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America (PNAS), los investigadores demuestran que el aumento en la temperatura de tan sólo 0.5ºC que sucedió durante el Periodo Cálido Medieval (hace aproximadamente 1000 años) provocó un aumento en la frecuencia de incendios naturales en los bosques de las Montañas Rocosas, en el Oeste de los Estados Unidos, haciendo que el 83 por ciento de los árboles ardieran.
 
Como explica Gonzalo Jiménez-Moreno, investigador del departamento de Estratigrafía y Paleontología de la Universidad de Granada y uno de los firmantes de este artículo, "sabemos que durante este período se alcanzaron temperaturas similares a las de las últimas décadas".
 
"Este hecho nos indica que el aumento que se está observando en la temperatura en la actualidad predice más y más fuertes incendios naturales en los bosques de esta región, lo que podría ser aplicado a otras regiones del mundo como la nuestra", destaca.
 
Los investigadores son capaces de averiguar cómo varía la frecuencia de incendios es una región en el pasado gracias al estudio de la cantidad de carbones microscópicos que encuentran en los sedimentos de los lagos.
 

Carbones en los sedimentos de los lagos

 
"Cuando se produce un incendio, se emiten muchos carbones en forma de humo a la atmósfera, y estas partículas caen y se depositan en las cuencas sedimentarias en un radio de unos kilómetros alrededor del foco del incendio" -continúa Jiménez-Moreno-. Al estudiar la cantidad de carbones por centímetro cúbico de sedimentos, vemos que había épocas en las que los incendios eran muy abundantes y otras no tanto".
 
De esta forma, "en este artículo hemos podido comprobar que, efectivamente, la cantidad de incendios naturales aumenta cuando aumentan las temperaturas, algo que ocurrió durante el Periodo Cálido Medieval y que está ocurriendo también en la actualidad".
 
Aunque el estudio ha sido llevado en las Montañas Rocosas de EEUU, el científico señala que estos resultados "pueden ser perfectamente extrapolados a otras zonas del planeta, como Europa, ya que desde hace décadas estamos viviendo un aumento de temperaturas similar al que provocó aquellos grandes incendios en el Período Cálido Medieval", un período extraordinariamente caluroso alrededor de 800-1300 d. C.
Fuente: Ambientum

30 de noviembre de 2015

El reciclaje de cobre y el CO2

El reciclaje de cobre a nivel mundial evita la emisión de un total de 40 millones de toneladas anuales de dióxido de carbono a la atmósfera, según un estudio del Instituto Europeo del Cobre (ECI) que incide en que el tratamiento de este material reciclado necesita de un 85% menos de energía que cuando se trata por primera vez.
 
Según esta entidad, la demanda de cobre en los países europeos se ha multiplicado en las últimas décadas, con un incremento del 250% desde 1960 hasta la actualidad debido sobre todo a los requerimientos de las nuevas compañías tecnológicas. Entre otras aplicaciones, este material se emplea en las baterías de teléfonos móviles, en los conductos de agua o en el sistema eléctrico de los hogares.
 
Sin embargo, a la vez que se ha incrementado la demanda de cobre ha aumentado también el porcentaje que se emplea y que procede del reciclaje, hasta alcanzar el 50% del total. Así, en 2014 se reutilizaron un total de 2,1 millones de toneladas de este material, procedentes de aparatos electrónicos y residuos reciclados. "El uso del cobre reciclado se convierte en un factor clave para minimizar el impacto medioambiental de su producción --explican los responsables de ECI--. El cobre reciclado conserva todas sus propiedades intactas, con lo cual puede ser utilizado para cualquiera de las múltiples aplicaciones que tiene este material".

19 de noviembre de 2015

Cómo medir la degradación del territorio

La degradación del territorio es la herencia irreversible de la desertificación y solo con grandes inversiones puede recuperarse una pequeña parte del esplendor perdido. Con este panorama la mejor estrategia es la prevención, como ocurre en la mayor parte de los problemas de carácter medioambiental. Y para atajarla hay dos vías: una es el análisis de los procesos socioeconómicos que causan la desertificación y la puesta en marcha de políticas de cambio, y otra vía es la detección temprana de la degradación y su magnitud.
 
Según la definición de Naciones Unidas, desertificación es “la degradación de tierras en zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, causada por diversos factores como las variaciones climáticas y las actividades humanas”. Además se precisa que degradación es la “reducción o pérdida de la productividad biológica o económica y de la complejidad de las tierras”.
 
Mapa de condición de la tierra de la Península Ibérica para el período 2000-2010, que refleja variaciones relativas de madurez ecológica / Estación Experimental de Zonas Áridas (CSIC).
Uno de los enfoques de medición es el conocido como RUE, siglas correspondientes a Rain Use Efficiency, que significa “eficiencia de uso de la lluvia”. El concepto detrás de estas siglas es el siguiente: la cantidad de biomasa producida por cada unidad de lluvia que cae en un territorio. Por ser un poco más específicos: los kilogramos por hectárea de vegetación que se producen cada año por cada milímetro de lluvia que recibe el suelo.
 
En zonas áridas, donde el agua disponible es el factor limitante para la vida, la degradación del territorio se mide a partir del RUE. Este sistema ofrece un retrato bastante preciso de la condición de la tierra, ya que refleja directamente la capacidad del suelo para amortiguar la falta de agua durante los periodos secos. Con un poco de elaboración matemática es posible determinar las zonas en mejor estado y hacer un seguimiento de su tendencia.
 
La tecnología actual permite sistematizar este método y evaluar la degradación en grandes territorios. Mediante imágenes de satélite es posible estimar la productividad vegetal para todo el planeta. Mientras que la red de estaciones meteorológicas, cada vez más amplia, permite obtener datos directos de precipitación y temperatura.
 
Ejemplo de aplicación del sistema 2dRUE en una sucesión de imágenes de Google Earth de un territorio que se está degradando / M.E. Sanjúan.
Una versión avanzada de este tipo de tecnologías es 2dRUE, desarrollada en la Estación Experimental de Zonas Áridas, del CSIC.  Se trata de una metodología de bajo coste, que usa datos públicos y abiertos. Tras una maquinaria computacional compleja, ofrece al usuario mapas contrastables y con una interpretación sencilla. El primer ensayo fue realizado en la Península Ibérica y, tras los resultados, ha sido adoptada por los gobiernos español y portugués con el fin de informar a la Convención de Naciones Unidas para la Lucha Contra la Desertificación, cuya misión es vigilar y mejorar la condición de los ecosistemas. Su éxito ha sido tal, que también se ha utilizado en el Magreb, Sahel, Mozambique y el Nordeste brasileño, y en la actualidad está siendo utilizada para toda China.
 
Fuente: 20 minutos. Autor: J. M. Valderrama que colabora con la Estación Experimental Zonas Áridas del CSIC y escribe en el blog Dando bandazos, en el que entremezcla literatura, ciencia y viajes.

9 de noviembre de 2015

Como contamina el tabaco

El tabaco no sólo perjudica seriamente la salud, sino que además es uno de los peores enemigos del medio ambiente. Desde su cultivo, producción, uso y hasta su desecho es contaminante como ningún otro producto de consumo masivo.

Si seguimos la cadena de producción del tabaco, encontramos desde el principio las primeras afecciones a la naturaleza. El cultivo de la Nicotina tabacum es una de las principales causas de deforestación mundial.  De hecho, de cada 8 árboles que se talan en el mundo, por lo menos 3 serán los responsables de dar el espacio necesario para la plantación. Además, esos árboles talados son toneladas de CO2 que se dejan de absorber.

Pero no es la plantación lo único que contribuye a la tala. No hay que olvidar que para elaborar cigarrillos hace falta papel. No hay que pensar mucho para adivinar de dónde se obtiene…

A eso hay que sumar que la planta del tabaco consume muy rápido los nutrientes del suelo, por lo que hay que usar pesticidas y fertilizantes adicionales para conseguir que tenga un buen desarrollo. Debido a estas prácticas, el suelo sufre un aumento de la erosión, pérdida de sustrato, filtración de contaminantes en aguas… y a las 2 cosechas, está prácticamente inservible.

Ya tenemos, además de una selva talada, un suelo degradado y cigarros listos para fumar.

Pero eso no es todo… ¿cuánto puede contribuir un cigarro a la contaminación del aire? En general, los fumadores se escudan en que los efectos del tráfico. Lo que no saben es las emisiones de los cigarrillos superan a las de algunos motores, concretamente los alimentados de biodiesel.


Sin olvidar que, entre calada y calada, el humo contribuye notablemente al aumento de Gases de Efecto Invernadero. De hecho, se estima que los fumadores producen al año 225.000 toneladas equivalentes de CO2, lo que equivale a 10.000 kilómetros recorridos por 12.000 coches. A eso hay que sumar otras partículas contaminantes derivadas de la combustión.

Tras los aplastantes datos anteriores, hay que reconocer que aunque contamina el aire en menor medida que el transporte y la industria, podemos sumar al tabaco parte de la culpa por la polución.

Aunque el precio del tabaco invite a fumarse hasta las colillas, los cigarros mal apagados son una de las principales causas de incendios forestales en el mundo. Así que agregamos “fuego” a la lista de problemas ambientales derivados de este vicio.
 
Cada año se tiran unos 4,5 billones de colillas en el mundo, fabricados con materiales no biodegradables. La colilla puede conservar restos de sustancias tóxicas, como el alquitrán o la nicotina. Esos residuos pueden llegar a ríos y lagos, y no es tan difícil que esto ocurra ya fumadores hay en todas partes.

En España, casi el 30% de la población fuma. Así que resumiendo, con cada cigarrillo hemos contribuido a la deforestación, a la degradación del suelo, a la contaminación atmosférica, a la generación de residuos y a provocar un posible incendio en un descuido. ¿Cuál es el resultado de multiplicar ?        Fuente: Ambientum

1 de noviembre de 2015

1 de noviembre, Día Mundial de la Ecología

La definición de Ecología engloba muchas disciplinas, aunque se denomina como tal, a la ciencia que estudia a los seres vivos, su hábitat, su distribución y cómo esas propiedades son afectadas por la interacción entre los organismos y su ambiente: «la biología de los ecosistemas». En el ambiente se incluyen las propiedades físicas que pueden ser descritas como la suma de factores abióticos locales, como el clima y la geología, y los demás organismos que comparten ese hábitat (factores bióticos).

Aunque sólo exista un día en el que se conmemora a lo largo del calendario anual, debería haber más; todos debemos tener presente la palabra ecología a lo largo de los 364 días restantes. ¿Por qué?, porque en un día no se puede recuperar todo el daño anual que hacemos a nuestro planeta. Con un poco de dedicación y cuidado cada jornada podremos tener un ambiente más saludable y menos nocivo para los seres vivos.
 
Las fatales interacciones del ser humano con el entorno pueden estar en simples gestos diarios: esa colilla que tiras al suelo, esa bolsa que se te vuela y llega hasta el mar,  ese envase de zumo que tu hijo deja olvidado en cualquier sitio, o esa botella de vidrio que sin saber porqué aparece en medio del bosque, son dolorosas acciones para el medio ambiente; que si nadie se preocupa o denuncia pueden ser la mecha que encienda la bomba. Nuestra huella debe ser lo más liviana posible.
 
Gracias a los ecologistas, sí, esas personas que están todo el día protestando, no sin razón; ahora mismo podemos disfrutar de un mundo más natural y menos artificial. Quiero desde nuestra publicación, en este día tan importante, por lo menos para algunos; ratificar de manera clara y eminente, el valioso trabajo que realizan todos esos individuos que aparecen en las noticias del telediario, arriesgando sus vidas por defender causas medioambientales, por defender algo que comprenden como suyo, y que forma parte de sí mismos. En eso radica el entendimiento de la palabra ECOLOGÍA con mayúsculas, en vislumbrar entre tanta información que nos llega por todos los sentidos, el saber discernir que es realmente lo importante para nuestro futuro como especie en el planeta.
 
Nosotros, que somos los dueños y señores de esta vasta extensión de tierra, agua y aire que denominamos mundo; tendremos que aplicarnos y aprovechar el tiempo que nos queda para proteger lo que todavía resiste a nuestra civilización. Una obra titánica que requiere el apoyo de cada una de las personas que habitamos el planeta, aunque sólo sean unos cuantos los que den la voz de alarma y sean los “cabezas de turco”.
 
Irremediablemente, no nos queda otra. Así que, ¿por qué no te sumas ahora mismo a esta empresa?. Revaloriza tu parque, tu bosque, tu lago …esos que tienes al lado y que aparecen semi-abandonados, son hábitats de muchas especies de animales y plantas, y un lugar de descanso y paseo para ti mismo. Vuélcate en su protección y dale muestras de aprecio. Es más fácil empezar por lo local, hay multitud de maneras con las que poder actuar. ¡Busca la tuya, tú eres el único que sabe lo que realmente se te da bien! Planta árboles, implica a tus vecinos, recoge la basura que veas tirada e intenta concienciar al resto, etc; es difícil lo sé, pero por algo hay que empezar.

13 de octubre de 2015

Día Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales

El tema del Día Internacional para la Reducción de Desastres del 2015 «Conocimiento para la Vida» forma parte de la iniciativa Step Up (Un paso hacia adelante) que comenzó en el 2011 y que cada año centra su atención en un grupo diferente.
 
El propósito del Día es aumentar el grado de sensibilización sobre el uso del conocimiento y las prácticas tradicionales, indígenas y locales, a fin de complementar el conocimiento científico en la gestión del riesgo de desastres y destacar diversos enfoques para hacer partícipes a las comunidades locales y los pueblos indígenas en la aplicación del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres.
 
El aspecto central del Día Internacional para la Reducción de Desastres de este año es el conocimiento tradicional, indígena y local, el cual complementa a la ciencia moderna y contribuye a la resiliencia de las personas en un plano individual y de la sociedad en conjunto. Por ejemplo, el conocimiento de las señales de alerta temprana en la naturaleza puede ser vital para velar por que se tomen acciones tempranas para mitigar el impacto de los desastres, tanto de evolución rápida como lenta, tales como sequías, olas de calor, tormentas e inundaciones. En conjunto con el conocimiento científico existente, tales como los informes que elaboran los meteorólogos, el conocimiento local es vital para las labores de preparación y se puede transmitir de generación en generación.
 
Tengamos presente que el grado de devastación, en pérdida de vidas humanas y daños materiales, que causan las manifestaciones extremas de fenómenos naturales —como las inundaciones, sequías, ciclones, terremotos o erupciones volcánicas— resulta de la combinación entre las fuerzas de la naturaleza y la actividad humana.
 
El efecto que estos peligros naturales tienen sobre las poblaciones depende en gran medida de decisiones que tomamos, a nivel individual o colectivo, respecto a nuestras formas de vida y al medio ambiente: desde la planificación de nuestras ciudades y el cultivo de los alimentos, hasta la enseñanza que recibimos en las escuelas. Es más, la actividad humana también influye en la frecuencia y la intensidad de estos fenómenos, por ejemplo, a través del calentamiento global.
 
La puesta en marcha de sistemas de prevención, alerta temprana, preparación y recuperación rápida disminuyen el riesgo y mitigan los efectos devastadores de las fuerzas de la naturaleza.
 
Por todo ello, la Asamblea General de la ONU decidió designar el 13 de octubre como Día Internacional para la Reducción de los Desastres (resolución 64/200 Documento PDF), con el propósito de concienciar a los gobiernos y a las personas para que tomen medidas encaminadas a minimizar estos riesgos.
 
Previamente, durante el Decenio Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales (1990-1999) y hasta 2009, el entonces denominado Día Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales se celebraba el segundo miércoles de octubre (resoluciones 44/236 Documento PDF y 56/195 Documento PDF).

10 de octubre de 2015

Rascacielos flotante limpia los oceanos del mundo

Hace algunos años pensar en un edificio que navegue los océanos y que además los limpie de toda contaminación era una utopía que probablemente solo podría existir en las películas de ciencia ficción. Hoy en día la realidad es otra, tal concepto, con todas sus implicaciones, existe y está a la espera de ser construido.
 
El rascacielos Seawer fue diseñado por Sung Jin Cho, un coreano que, preocupado por la gran cantidad de plástico que pone en peligro nuestros océanos, presentó este proyecto en ‘2014 eVolo Skyscraper Competition’, certamen que premia a las mejores propuestas de edificios a nivel mundial y donde el edificio flotante ganó una mención de honor.
 
Se trata de una estación hidroeléctrica100% auto sostenible. Para lograr esto el Seawer se diseñó para funcionar con energía proveniente del sol, del agua de mar y de los desechos plásticos que filtra al darle tratamiento al agua por la que navega.

Según su creador, “su principal tarea es trasladarse por el océano limpiando el agua de basura plástica a la vez que genera energía eléctrica limpia. La estructura del Seawer consta de 5 capas de filtros similares a las barbas de las ballenas, que separan el agua de las partículas plásticas”.

Luego de ser separados, los residuos serían conducidos a una planta de reciclaje a bordo, donde se transformarían en energía eléctrica mientras que el agua es conducida a un tanque de sedimentación para ser liberada de nuevo en el océano.

Millones de toneladas de basura al año son descargadas en los océanos, estas a su vez se trasladan hasta acumularse en determinadas áreas como la Gran Mancha de Basura del Pacífico. Conocida también como la ‘Sopa de Plástico’, este foco de contaminación marina posee dos veces el tamaño del estado de Texas, Estados Unidos, y contiene seis veces más plástico que biomas de plancton. Es también el motivo por el que Seawer fue diseñada en primer lugar.

La estructura cuenta con un gran hoyo de drenaje de 550 metros de diámetro y 300 metros de profundidad que sería localizada en el corazón de la ‘sopa de plástico’ para eliminarla. De darse la construcción de semejante proyecto, la humanidad estaría dando un importante paso en la recuperación de los océanos y del medio ambiente en general.

30 de septiembre de 2015

Llaves y candados de bronce ¿qué hacer?

Todos tienen llaves, candados y picaportes acumulados en algún cajón. Irónicamente, pocos saben que el bronce puede reciclarse, y que es imperativo hacerlo. ¿Por qué es tan importante tratar este material?

En primer lugar, porque se trata de un recurso no renovable. El bronce es una aleación compuesta por cobre y estaño, dos metales que se extraen de la corteza terrestre mediante la explotación minera, consumiendo gran cantidad de agua y energía, y que puede decantar en la contaminación de ríos y aguas subterráneas.

Además, la vida útil de los productos en que se usa este material puede ser muy breve, como es el caso de los electrónicos, que actualizamos constantemente. Es decir, con una sola llave, te cerrás a un mundo cada vez más contaminado. Reciclando el bronce, las reservas mundiales de sus componentes pueden prolongarse para un futuro. En resumidas cuentas, necesitamos reutilizarlo y reciclarlo para que la extracción de estos materiales se reduzca al mínimo necesario.

En segundo lugar, hablamos de un material dañino. El cobre (uno de sus elementos constitutivos) contiene compuestos tóxicos, incluso letales para la vida humana.

Ahora, la pregunta es: ¿cómo saber si mis llaves son de bronce? ¿ y cómo hago para deshacerme de mis residuos de bronce?

Para reconocer objetos de bronce hay un truco muy sencillo: acercá al objeto un imán. Cuenta como bronce reciclable cualquier llave u objeto similar que no atraiga el imán.

Una vez que separes tu bronce, encuentrales un destino. ¡Jamás a la basura! Hay varias asociaciones que se encargan de su recolección y reciclaje:

– El Programa de reciclado de la Fundación Garrahan recolecta bronce para reciclar con un fin social. Podeis ver sus puntos de entrega en www.vaporlospibes.com.ar.

– Sino, podeis encontrar puntos de recoleccióni a través de este mapa: www.dondereciclo.org.ar/mapa/bronce    (http://www.dondereciclo.org.ar/)
Fuente: Ecoportal.net

16 de septiembre de 2015

Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono

En 1994, la Asamblea General proclamó el 16 de septiembre Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, para conmemorar el día en que se firmó en Montreal, en 1987, el Protocolo relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono (resolución 49/114 Documento PDF, de 19 de diciembre).

Se invitó a todos los Estados a que dedicaran ese Día a la promoción de actividades relacionadas con los objetivos del Protocolo y sus enmiendas. La capa de ozono, que es una capa frágil de gas, protege a la Tierra de la parte nociva de los rayos solares, y por consiguiente, ayuda a preservar la vida en el planeta.

La eliminación de los usos controlados de sustancias que agotan el ozono y las reducciones conexas no solo han ayudado a proteger la capa de ozono para la generación actual y las venideras, sino que también han contribuido enormemente a las iniciativas mundiales dirigidas a hacer frente al cambio climático; asimismo, han protegido la salud humana y los ecosistemas reduciendo la radiación ultravioleta dañina que llega a la Tierra.

Este año se cumple el trigésimo aniversario del Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono; un hito en la protección de esta capa de la atmósfera. El tema de este año para el Día Internacional es: «El ozono: todo lo que hay entre usted y los rayos UV».

1 de septiembre de 2015

Se agotan los recursos del planeta

Un grupo internacional de investigadores demuestra que muchos recursos clave han tocado techo en la productividad, concluyendo que los recursos "renovables" no son sinónimo de "ilimitados". Estos expertos descubrieron que la tasa de crecimiento anual de 18 recursos renovables, por ejemplo, el aumento de la producción de carne o la pesca de peces, alcanzó su punto máximo en 2006.

Científicos de la Universidad del Estado de Michigan (MSU, por sussiglas en inglés), el Centro Helmholtz de Investigación Medioambiental (UFZ, por sus siglas en alemán) en Alemania y la Universidad de Yale, en Estados Unidos, analizaron las tasas de producción y extracción de 27 recursos renovables y no renovables mundiales.

Estos expertos examinaron 20 recursos renovables, como el maíz, el arroz, el trigo o la soja, que representan alrededor del 45 por ciento de la ingesta de calorías mundial, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, así como de productos de origen animal, como el pescado, la carne, la leche y los huevos.

Estos resultados se publican en el último número de la revista internacional 'Ecology and Society' y están entre las investigaciones destacadas esta semana en la revista 'Nature'. Según el director del Centro de MSU para la Integración de Sistemas y Sustentabilidad, Jianguo 'Jack' Liu, esto es razón de peso para abordar los problemas de sostenibilidad de manera integral, en lugar de buscar una sustitución individual para compensar la escasez.

"La gente suele hablar de sustitución. Si nos quedamos sin un recurso, sólo lo sustituimos por otro. Pero si se están agotando varios recursos, tenemos un problema", alerta Liu. Los investigadores utilizaron un conjunto de datos global y hacen suposiciones limitadas, basándose en la potencia de los ordenadores para extraer el patrón de la base de datos.

16 de agosto de 2015

Basura espacial

El número de escombros espaciales que rodean actualmente la Tierra parece haberse estabilizado en la primera mitad de 2015, manteniéndose en valores que rondan los 16.900 objetos; más concretamente, el año 2.015 se inició con 16.906 objetos localizados en el espacio y junio ha cerrado con un ligero aumento hasta llegar a los 16.925 objetos. 
 
Estos son los datos publicados por la Oficina del Programa de la NASA de Restos Orbitales que hace recuento de la basura espacial que orbita la Tierra.
 
Por 'basura espacial' se entiende la cantidad de satélites activos o inactivos que han sido lanzados o bien bajados de sus órbitas para ser hundidos en el mar, así como los cohetes espaciales antiguos y en funcionamiento, y demás objetos procedentes de la fragmentación de residuos, generados por ejemplo en impactos, explosiones y/o de la pérdida de herramientas de los astronautas.
 
De manera desglosada, de estos 16.925 objetos espaciales que rondan el planeta, la Comunidad de Estados Independientes -antigua Unión Soviética- se mantiene como la que mayor cantidad de basura desecha al espacio, con un total de 6.282 objetos (que ha bajado en más de medio centenar de objetos desde principios de este año); seguida de Estados Unidos con 5.182 y de China con 3.706.
 
Mientras, la Agencia Espacial Europea (ESA) sigue siendo la entidad que menos objetos emite al espacio, con 97 cuerpos, de los cuales 52 proceden de explosiones y 45 son cohetes, cuerpos y demás escombros. Además, hay países que independientemente de la agencia espacial a la que pertenezcan, también envían y 'arrojan' a la órbita terrestre aparatos espaciales.
 
Este sería el caso de los 508 franceses, los 209 que tiene Japón, los 165 indios, o los 776 de 'otras' naciones, según se desprende de este informe de la NASA. El programa de la NASA encargado de controlar la basura espacial es el 'U.S Space Surveillance Network' (SSN). La iniciativa la desarrolla el Gobierno de Estados Unidos y tiene como principal objetivo detectar, controlar, catalogar e identificar estos objetos hechos por el hombre y que orbitan alrededor de la Tierra.


Este programa también se encarga de predecir cuándo y dónde caerá un objeto de nuevo en la Tierra, cuál es su posición en el espacio, detectar nuevos cuerpos residuales en el espacio y a qué país pertenecen, además de informar a la NASA si estos objetos interfieren con la estación Shuttle.

17 de julio de 2015

Día Nacional del Defensor del Medio Ambiente


Las Cortes de Castilla-La Mancha aprobaron en una sesión plenaria extraordinaria una Ley por la que se establece el día 17 de Julio de cada año como Día Nacional del Defensor del Medio Ambiente


Esta Ley quiere mantener vivo el recuerdo y el reconocimiento de la sociedad a los once trabajadores del Servicio de Extinción de Incendios de Castilla-La Mancha fallecidos en el incendio ocurrido el 17 de Julio de 2005 en el Ducado de Medinaceli, en Guadalajara.  


Este día tiene como objetivo establecer un reconocimiento público a estos profesionales que trabajan y luchan todos los días por preservar el medio ambiente que nos rodea. 
 

Desde Green Galley queremos recordar que la época estival es la más propensa a que ocurran incendios forestales tan desastrosos como el de Guadalajara. 


Nosotros también queremos elogiar el gran trabajo que realizan todos los que contribuyen a la extinción de los incendios, pero no sólo a ellos, sino al gran número de personas que desinteresadamente se preocupan por mantener los montes limpios, vigilarlos de cualquier amenaza, y que dedican parte de su vida y tiempo a estas labores.
 

Gracias a todos. Hoy es vuestro día. ¡Felicidades!

7 de julio de 2015

7 de Julio. Día Mundial de la Conservación del Suelo

Cuando las primeras grandes civilizaciones comenzaron a cultivar el suelo, 5000 años antes de Cristo, se produjo un fuerte proceso erosivo. Babilonios, fenicios y otros pueblos no advirtieron los efectos erosivos de la lluvia sobre sus suelos ondulados y desnudos como consecuencia del desmonte de los bosques y la desaparición de las praderas naturales. Así se originaron las primeras grandes áreas erosionadas.

Con la llegada de los primeros colonos, se inició la agricultura extensiva en América, por lo que el problema de la erosión de suelo no es tan viejo; no obstante, su efecto también se hizo sentir y los colonos, cuando los suelos dejaban de producir cambiaban de lugar, pero esto ya no fue posible cuando el número de colonos fue aumentando y se acrecentó con la competencia por las tierras.

En muchos países los productores advirtieron el problema y comenzaron a aplicar prácticas que les permitieron cultivar el suelo sin erosionarlo. En EEUU, alrededor del año 1900, Hugh Hammond Bennet, científico pionero en la lucha contra la erosión, comienza a publicar sus trabajos. En memoria de su desaparición física se instituyó el día 7 de Julio como el Día Mundial de la Conservación del Suelo.

Palabras del  Dr. H. H. Bennett: “La tierra productiva es nuestra base, porque cada cosa que nosotros hacemos y aún casi todo lo que nos convierte en una gran nación, comienza y se mantiene con la sostenida productividad de nuestras tierras agrícolas. Usted y yo como individuos o agrupados como parte de la raza humana, somos inseparables, excepto por la muerte. El mismo desafío nos confronta a cada uno de nosotros. Su deber y el mío es claro como el cristal y es intransferible. Podemos ayudar o podemos oponernos. La elección está en nuestras manos.” 

En la actualidad, el concepto de conservación está basado en un profundo conocimiento del proceso erosivo, ya sea de la erosión hídrica (producida por el agua) o de la eólica (producida por el viento). En la primera, la gota de lluvia al caer sobre el suelo provoca la separación del mismo en pequeñas partículas, las que son transportadas por el escurrimiento del agua acelerando la desagregación.

En el caso de la erosión eólica, el proceso se basa en principios similares; el viento actúa como agente externo produciendo el movimiento de las partículas del suelo en tres formas diferentes: saltación, suspensión y arrastre superficial.

A través de los permanentes avances tecnológicos y culturales, se persigue sobre todo en los últimos años un mejor tratamiento de este vital recurso que muestra ostensibles señales de degradación en muchas zonas de nuestro país. Estos conocimientos han servido de base para la elaboración de técnicas y prácticas conservacionistas.

La desertificación es el resultado de fenómenos naturales que pueden agruparse en tres grandes categorías: la deforestación, el uso desequilibrado del suelo y el mal uso de la mecanización. A medida que aumenta la degradación de las tierras, también se degrada la calidad de vida de quienes la habitan.
Para las naciones cuya economía depende de la riqueza del suelo, su cuidado es fundamental. Nuestro país aún no ha tomado conciencia de ello y sus prácticas agropecuarias no realizan tareas conservacionistas para preservar la productividad de todas las áreas agrícolas ganaderas afectadas, sino que una vez agotados los nutrientes de los terrenos, los abandonan a su suerte y buscan otras tierras sanas dónde empezar nuevamente su actividad destructiva de tierras.

En nuestro país, el 75 por ciento del territorio está sujeto a procesos erosivos causados por las actividades agrícolas, ganaderas y forestales. 

¿Por qué es importante el suelo?
  • El ecosistema en el cual vivimos no podría existir sin él.
  • Actúa como un filtro para proteger el agua, el aire y otros recursos.
  • Las bacterias que en él se encuentran oxidan el metano y el óxido nitroso, haciéndolos menos peligrosos
  • En su crecimiento, las plantas requieren 16 nutrientes esenciales. Excepto tres, los restantes se consiguen en el suelo.
  • Recicla los residuos orgánicos (hojas, rastrojo, raíces, desechos animales, etc.) en nutrientes necesarios para el crecimiento de las plantas.
  • Las plantas necesitan una gran cantidad de agua para su crecimiento, y el suelo es la mejor unidad de almacenaje.
  • Construye un excelente sistema de distribución del agua
  • El agua subterránea se mueve libremente a través del suelo recargando otras áreas.
  • El 85% del dióxido de carbono atmosférico proviene de las reacciones encontradas en el suelo.
  • Las plantas, animales y microorganismos del suelo son óptimos recicladores del carbono, propiciando una saludable atmósfera para todos nosotros.